LEJOS DEL MAR

-No sé si podré vivir sin esto, María-, advierte él. Ella no dice nada. Recapitula sus recuerdos juntos y ahí siempre está el océano, como protagonista inevitable.
-No sé vivir lejos del mar- lamenta, impávido sobre la roca, con la mirada perdida en el horizonte.
Ella se lleva una mano al vientre. Nota un impulso, algo parecido a una emoción. Quizá el bebé también lo siente.
-Lo haremos lo mejor posible-, dice María; pero él insiste.
-Me da miedo Madrid. No sé si estoy acertando María. ¿Estamos acertando?-, cuestiona cuando ambos se encuentran la mirada porque está empezando a llover...

Comentarios

Entradas populares